Contundente. Cobreloa comenzó con el pie derecho su participación en el Apertura, con sendas actuaciones de Paredes y Barrios.
Una imagen que no se cansó de repetirse ayer: Cobreloa celebró en 7 oportunidades. Huerta y Paredes tuvieron su debut soñado.
Sólo un minuto se demoró Cobreloa en abrir el marcador ante un clásico rival como lo es el Club de Deportes Antofagasta (CDA), en una tarde que los hinchas no olvidarán fácilmente, porque José Luis Díaz, aprovechaba una distracción en la zaga "Puma",para comenzar una tarde histórica en el Municipal de Calama.
Lo de ayer fue un vendaval que arrasó con los sueños celestes de sumar siquiera un punto en el debut. Las figuras, Esteban Paredes y Lucas Barrios que llenaron las gargantas de gol a los hinchas locales. Al minuto lo hizo el "Pepe". La cuota de suspenso- la única del encuentro- la dejó Cristián Reyneros, el ex Huachipato ganó de cabeza en un tiro libre de Mauricio Donoso, pero fue lo único que mostró la visita, porque los zorros fueron implacables. A los 18 minutos, Esteban Paredes debutaba con buen fútbol y con su gol, el que abría el camino a la goleada naranja.
El punta se repitió el plato a los 37 de la primera fracción, y se asoció no sólo a Lucas Barrios, que también se mostró muy bien, sino que a otro debutante como lo fue Cristián Ríos. El trasandino como un jugador de ida y vuelta.
Cobreloa se iría cuatro a uno al descanso, y eso que faltaba 45 más, y el marcador no estaba para nada cerrado.
Ambición naranja
Sin Fernando Díaz en el banco, los jugadores del CDA no encontraron la fórmula para contrarrestar el juego que dispuso Gustavo Huerta para los locales, que en ningún momento supieron cómo jugarle a un Cobreloa que se simplemente pasó por encima de los celestes.
Ya en el segundo capítulo del encuentro Esteban Paredes a los 63 del complemento seguía y seguía, y estructuraba el 5 a 1. Macizo. Pero la ambición y las ganas de comenzar con goleada fueron más y Lucas Barrios a los 76, en una excelente jugada de toques se inscribía con el segundo, y sexto para los naranjas. A esas alturas, los "Pumas", sólo pensaban en el regreso a Antofagasta.
Pese a lo contundente, hubo ciertas preocupaciones. El juego aéreo de Cobreloa fue, por momentos muy pálido, Gran parte de los tiros de esquina, o bien los tiros libres eran siempre de los centrales antofagastinos que no mostraban mayores problemas para conectar el balón.
Otro que también se robó la película fue Fernando Hurtado. El meta respondió cuando se le necesitó. Mostró mucha seguridad y madurez, como lo hizo al tapar un remate a quemarropa de quizá el único hombre que generó peligro, el centrodelantero Sebastián Cobells.
Cuando aún quedaba en la retina de los asistentes al Municipal por el seis a uno, Lucas Barrios se despachó un potente disparo, que dejó atónitos a los hinchas. Un siete a uno, y una historia que estaba sellada. Un debut a lo más grande, y ante un clásico rival, que perdía su calidad de invicto, al menos en esa condición llegaba la visita, que incluso le había ganado por tres a dos en la Noche Naranja a Cobreloa.
Locura total. Algarabía porque este equipo se estrenaba con senda goleada.
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